De los tres tipos de reservas de agua dulce que podemos encontrar en nuestro planeta... el agua atmosférica, es la única cuya explotación, es totalmente sostenible.
El agua contenida en la atmosfera, en su mayoría, es casi pura, convirtiéndose en un recurso natural de altísima calidad, que presenta valores de conductividad eléctrica y dureza, muy por debajo, de los valores mínimos recomendados por los principales organismos internacionales, para su uso productivo.
En la actualidad, este valioso manantial de agua dulce, es totalmente desaprovechado por el hombre a pesar de que, en muchos casos, coincida su localización, con zonas del planeta donde existen grandes deficiencias en el abastecimiento de agua.